Las lluvias torrenciales y tormentas asociadas a una DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) son un fenómeno meteorológico cada vez más frecuente. Estos episodios pueden generar inundaciones, corrientes peligrosas y daños materiales, por lo que es fundamental estar preparados. Desde SPM Prevención, compartimos los principales protocolos de seguridad para proteger tanto tu entorno laboral como personal.

¿Qué es una DANA y por qué debemos estar atentos?

Una DANA se produce cuando una masa de aire frío queda aislada en niveles altos de la atmósfera, provocando lluvias intensas en cortos periodos de tiempo. Esto puede ocasionar inundaciones rápidas, desbordamientos de ríos y complicaciones graves en la movilidad. Ante estos riesgos, la prevención y la actuación correcta son claves.

1. Medidas preventivas antes de la DANA

Consulta las alertas meteorológicas:

  • Mantente informado a través de fuentes oficiales como AEMET o Protección Civil. Estas entidades emiten alertas específicas por zonas y grados de riesgo.

Revisa tu entorno:

  • En casa o en el trabajo, asegúrate de que los desagües y canalones están despejados.
  • Protege los puntos bajos de tu propiedad con sacos de arena o barreras temporales.

Elabora un plan de emergencia:

  • Define rutas de evacuación y un punto de reunión seguro.
  • Informa a tu familia o equipo de trabajo sobre este plan.

Prepara un kit básico:

  • Incluye elementos esenciales como linterna, pilas, agua potable, alimentos no perecederos, botiquín de primeros auxilios y ropa impermeable.

2. Actuación durante la DANA

Evita desplazamientos innecesarios:

  • Quédate en casa o en un lugar seguro siempre que sea posible. En caso de emergencia, sigue las indicaciones de las autoridades.

No cruces zonas inundadas:

  • Evita caminar o conducir por áreas con acumulación de agua, ya que las corrientes pueden ser más fuertes de lo que aparentan. Solo 30 cm de agua pueden arrastrar un vehículo.

Desconecta los equipos eléctricos:

  • Si hay riesgo de inundación, desconecta los aparatos eléctricos y corta el suministro eléctrico para evitar cortocircuitos.

Mantente informado:

  • Escucha la radio o consulta las redes sociales de fuentes oficiales para conocer la evolución de la situación.

3. Medidas específicas en el entorno laboral

Si trabajas al aire libre:

  • Suspende temporalmente las actividades en exteriores durante las lluvias intensas o tormentas eléctricas.
  • Proporciona a los trabajadores equipos impermeables y asegúrate de que conocen las rutas de evacuación.

En oficinas, naves o talleres:

  • Comprueba que las salidas de emergencia estén libres de obstáculos.
  • Comunica de inmediato cualquier incidencia a los responsables de seguridad.

4. ¿Qué hacer después de la DANA?

No regreses inmediatamente a zonas afectadas:

  • Espera a que las autoridades confirmen que es seguro volver. Las zonas inundadas pueden esconder riesgos como cables eléctricos, deslizamientos de tierra o agua contaminada.

Evalúa los daños con precaución:

  • Notifica los desperfectos a tu seguro antes de realizar reparaciones importantes.
  • Evita el contacto directo con agua estancada.

Refuerza la prevención para el futuro:

  • Si has detectado vulnerabilidades en tu entorno, considera implementar medidas adicionales, como sistemas de drenaje mejorados o barreras permanentes.

Conclusión

Las DANAs son un recordatorio de que la prevención es clave para protegernos ante riesgos meteorológicos extremos. Tener un plan, mantenernos informados y actuar con prudencia puede marcar la diferencia entre la seguridad y el peligro. Desde SPM Prevención, estamos aquí para ayudarte a implementar medidas preventivas eficaces, tanto en el ámbito laboral como personal.

Para más información sobre cómo garantizar la seguridad en tu entorno, no dudes en contactarnos.